El agua de la piscina puede no estar siempre cristalina y transparente. Hay algunos factores que hacen que el agua se pueda volver turbia o un poco verde.
Uno de los motivos frecuentes que hacen que el agua no esté completamente limpia es que la filtración de la piscina sea pobre. En este caso debemos realizar un contralavado de filtro para solucionar el problema.
También puede deberse a un PH elevado que deberemos estabilizar para que el producto químico actúe correctamente y podamos volver a disfrutar de agua limpia y clara en nuestra piscina.
Por último, si hay un período de abundante lluvia, puede que el agua de la piscina se vuelva verde. En este caso, recomendamos añadir un poco de cloro granulado al agua para que con la entrada de agua nueva no se alteren los niveles de PH.