La electrolisis salina es un sistema de desinfección que mejora las cualidades del agua, evitando la manipulación de productos químicos agresivos, y evitando problemas secundarios a los bañistas. El tratamiento del agua mediante la electrolisis salina, es un ciclo cerrado, en el que el cloro generado destruye la materia orgánica y los patógenos, transformándose otra vez en sal.
Su futuro
El gran éxito que están teniendo estos equipos cada día va a más, hecho que ha forzado a las marcas líderes del sector de la piscina a seguir investigando y mejorando este sistema de desinfección. Con el tiempo se han desarrollado los equipos llamados Low Salt, equipos con nivel de sal en el agua realmente bajo.
Un equipo normal de electrolisis salina trabaja con una cantidad de sal de entre 4 y 7 kgs por m3, o lo que es lo mismo, entre 4 y 7 gr/litro. En cambio, un equipo de electrolisis salina Low Salt trabaja con 2 o 3 gramos de sal por litro, un nivel de sal muy cercano a los niveles de sal existentes hoy en día en el agua de la red.
Las ventajas de los equipos Low Salt son múltiples:
- Conocidas propiedades antisépticas para la piel y el cabello.
- Eliminación de las irritaciones de piel y ojos debido a la eliminación de cloraminas.
- Desinfección más eficaz debido a la acción combinada del cloro y otros agentes resultantes de la electrolisis (oxígeno activo), y la propia oxidación de la materia orgánica en las células electrolíticas.
- Ahorro significativo del consumo de sal.
- No es nada agresivo, por lo que es un sistema ideal para piscinas de acero inoxidable.
- Reducción del olor a cloro en la piscina, debido al equilibrio resultante de la electrolisis.